Por: Equipo Editorial
El mes de ayuno nos ayuda a reflexionar sobre dónde estamos, qué hemos hecho y hacia dónde queremos ir. Muchos de nosotros podemos estar más sensibles pero a la vez con mucho entusiasmo. En este estado de entusiasmo, intentamos dar la bienvenida al mes de Ramadán haciendo las preparaciones necesarias. Aun así, puede que se nos hayan olvidado algunas cosas. Aquí os dejamos algunos consejos para sacarle el mayor provecho al ayuno durante este Ramadán:
1: Es importante convencerte a ti mismo de que vas a seguir la rutina de Ramadán. Levantarte antes de Fayr, tomar el suhur y hacer la oración. Esta es la rutina sobre la que te tienes que mentalizar. Es muy común que los primeros días de Ramadán sea fácil seguirla, pero una vez que comenzamos a estar débiles debido al cansancio del paso de los días, puede que empecemos a quedarnos dormidos y al final esa sea la rutina que seguimos. Intenta no caer en esto, y mantener el rumbo que te habías propuesto.
2. Reduce el sodio en tu dieta, especialmente en el suhur. Esto te ayudará a no tener tantas ganas de beber durante el día. Es muy importante que evites las comidas muy picantes, con mucha azúcar, grasas y fritas. Por el contrario, incluye en tu dieta todo tipo de comida que sea rica en fibra, para ayudar a la digestión. Otro alimento recomendable son los carbohidratos, en una dosis moderada claro está. Intenta que los cereales sean integrales así como el arroz y la pasta. La fruta y la verdura no solo son sanas sino que aportaran mucho equilibrio en tus comidas. Además, te ayudarán a sentirte bien durante todo el día de ayuno, ¡por lo que no te olvides de ellas! Y el ingrediente estrella del Ramadán son los dátiles, por supuesto. Te aportaran los nutrientes necesarios y te darán mucha energía. Puedes encontrar muchas recetas con ellos, o simplemente tómatelos tal cual, ¡su sabor es delicioso! Hidrátate bebiendo agua por la noche y antes de Fayr, si te cuesta, intenta comer alimentos que contengan mucha agua como la sandía o el calabacín. Y por último, intenta evitar tomar café o té, son muy diuréticos además de aportarte toxinas que tu cuerpo en ayunas no es capaz de eliminar.
3. ¡No te pegues el atracón! Tener el estómago vacío durante el día, y comer muchísimo por la noche te puede causar digestiones muy pesadas y molestias intestinales. Es mejor que comas menos por la noche, y te tomes un buen suhur que te ayude a estar todo el día con energía.
4. Encuéntrate con la comunidad. En muchas mezquitas se rompe el ayuno en conjunto, por lo que intenta ir a la mezquita más próxima y relacionarte con los demás musulmanes. Estar con otros musulmanes tiene muchos beneficios y además, ¡puede que tengas alguna que otra invitación para romper el ayuno!
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