Autor: WTA
Probablemente uno de los logros más notables de la mente musulmana fue su contribución al pensamiento filosófico. En comparación, la influencia sobre la literatura fue menos espectacular. Sin embargo en esta esfera también desempeñó un papel decisivo.
Hay que considerar el nacimiento de la poesía lírica moderna en Europa; esto se puede fijar con bastante precisión con respecto al tiempo y al lugar. Apareciendo casi simultáneamente en España y Francia, a principios del siglo XII, luego se extendió a Italia y al resto de Europa. Los romances españoles y las trovas provenzales son sus primeras formas de expresión. El renacimiento de la literatura en los países de Languedoc supera los limites de la historia literaria. Marca el punto decisivo en la civilización del occidente.
Sería imposible exagerar el valor creativo e inspirado de la poesía provenzal, tanto en el mundo del sentimiento como en el de las artes, que deriva del árabe. Sin ella, no hay ninguna explicación para la poesía italiana ni para la española, ni para los trovadores alemanes y, desde luego, mucho menos para la poesía cortesana del norte de Francia. Pero, ¿Qué es exactamente la canción de los trovadores?. El trabajo de Julien y de Ramón Menéndez Pidal, y los estudios de R. Nycle, muestra sin duda alguna, que la poesía de los trovadores, con sus grandes cambios en el modo de pensar y de sentir de Occidente deriva directamente de la poesía popular árabe-andaluza.
Las últimas investigaciones de la Nueva Escuela Española de Historia, han establecido entre la poesía lírica andaluza, cuyos primeros ejemplos aparecieron a finales del siglo IX, y la poesía lírica provenzal, unos paralelos tan claros y una analogía tan obvia, que es imposible explicarlas sin admitir la influencia decisiva de una sobre otra.
Esta forma de poesía apareció en Andalucía en el siglo IX, en el popular “Zerjel”. Esto representa uno de los más atractivos resultados de la fusión de dos civilizaciones, la árabe y el romance.
El notable trabajo de Asím Palacios sobre el origen musulmán de la Divina Comedia, ha demostrado la influencia que ejerció sobre Dante el gran místico Muhy Addin Ibn Arabi, y el poeta ciego Abul Ala Al Maari. La novela filosófica de Ibn Tufayl “Hay Ibn Yakzan” ( El viviente, hijo del vigilante), traducida al latín por Edward Pococke el Joven, en 1671, y después a la mayoría de las lenguas europeas, inspiró a Daniel Defoe y le sirvió como modelo para su obra “Robinson Crusoe”.
Ibn Hazm, una de las mentes más brillantes de la España musulmana, ejerció una influencia constante sobre la literatura Occidental. Fue un escritor muy prolífico, escribió varias fabulas, cuentos y apologías que, a partir del siglo XIII, se extendieron por toda Europa.
La obra “Don Quijote”, de Cervantes, esta profundamente imbuida del espíritu árabe. Se puede concluir diciendo como hace Philip Hitti que: “En general, la contribución árabe más valiosa a la literatura de Europa medieval fue su influencia sobre la forma, gracias a la cual la imaginación occidental pudo liberarse de las reglas impuestas por la tradición”.
Pero no se puede cerrar este capítulo sobre la literatura musulmana sin mencionar la poesía persa, que es su máximo ornamento. Ciertamente no contribuye de una forma directa a la evolución del pensamiento occidental, ni al refinamiento de la sensibilidad occidental, pero por su maravilloso colorido, por su delicado lirismo, suntuoso y sutil al mismo tiempo, y por su gracia soberana, se ha ganado la admiración del mundo entero.
Goethe, hablando con el canciller Von Mnelle, dijo una vez: “A lo largo de 5 siglos los persas tuvieron solamente 7 poetas que ellos consideraron como verdaderos maestros, pero incluso entre que aquellos que rechazaron, los había mejores que yo”.
Hafiz fue el primer poeta persa que consiguió verdadera fama en Europa. Fue el orientalista alemán Von Hammer-Purgstall quien tuvo el honor de introducir al maestro de los “ghazels” (poemas líricos) a los lectores occidentales. Su traducción de toda la colección de poemas de Hafiz apareció en el año 1812-1813. La verdad es que, al principio, sólo trajo la atención de un limitado círculo de literatos. Pero fue completamente diferente cuando Goethe publicó su colección de poemas llamados ” West-Ostlicher Diwan”, en 1819. La colección de poemas de Hafiz, fue traducida de manera parcial o en su totalidad a todas las lenguas europeas. Pero la fama de Hafiz, como la de todos los demás poetas de oriente y occidente fue superada por el renombre mundial de Omar Khayyam. Él es verdaderamente, uno de los poetas más leídos en los dos hemisferios. Existen por lo menos doce traducciones del “Rubayat” en francés, así como varias en inglés, alemán, ruso, italiano, español, danés, húngaro y turco.
Se puede hablar, con razón de un verdadero culto al poeta en los países anglosajones. El club de Omar Khayyam se fundó en Londres en el año 1892 y dio origen a una multitud de instituciones similares.
Esto son solo algunos ejemplos de la aportación del la literatura islámica al la literatura universal, pero sin duda hay muchos más. El Islam no es un cultura, por lo que es difícil definir qué es y qué no es ‘Islámico’, pero dentro de todo territorio donde el Islam ha estado establecido la cultura y el refinamiento han florecido, baste ver Al Andalus, el Imperio Otomano, el Dawlet Moghul y muchos otros ejemplos. Es por esto que el aporte del Islam a la literatura universal es difícil de medir, sobre todo por que lo que realmente el Islam aporta y ha aportado a la literatura universal es una concepción diferente del mundo.
Tomado con alguna ediciones y añadidos de carácter editorial de la página islamstory.com