Por: Imam Omar Sulayman
Para los islamófobos, era un hombre violento que venció a sus enemigos con terror y los gobernó con crueldad. Para más de mil millones de musulmanes, representa el epítome de la misericordia, y nunca permitió que la persecución o la opresión empañaran su exaltado carácter. Entonces, ¿qué imagen es más precisa?
Las descripciones de la vida de Muhammad, la carrera militar y las tradiciones forman la base para la mayoría de los juicios sobre su misión. El Islam en su conjunto, a través de estas representaciones, es visto como una religión de paz o una religión de guerra, dependiendo de qué interpretación del mensajero y el mensaje se sigan. Las críticas modernas de algunos de las acciones y proyectos del Profeta están destinadas a cuestionar la civilidad del Islam en el continuo y frabicado choque de civilizaciones que alimenta tanto a los islamófobos como a los extremistas. Michael Bonner señala: “Muchos de estos argumentos modernos sobre la historiografía, y sobre el surgimiento del Islam y los orígenes de la yihad en general, comenzaron en el siglo XIX y principios del siglo XX entre los especialistas académicos europeos en el estudio del Oriente, a los que se les suele llamar orientalistas”. [1] A continuación, señala que la motivación de estos argumentos no puede desconectarse de “su participación en el proyecto colonial”. [2] Al retratar al Profeta como un bárbaro, entonces no se puede tratar a sus seguidores sino como un cuerpo político intrínsecamente violento que empleará cualquier medio necesario para lograr la dominación global.
Lo que no es cuestión de controversia es que Muhammad logró ejercer un poder sin precedentes tras décadas de persecución. Michael Hart, que lo consideró el hombre más influyente de la historia, escribió: “Mi elección de Muhammad para encabezar la lista de las personas más influyentes del mundo puede sorprender a algunos lectores y puede ser cuestionada por otros, pero fue el único hombre en la historia que tuvo un éxitos extraordinario tanto a nivel religioso como secular”. [3] La cuestión de si sacrificó sus principios o no en la búsqueda de ese éxito es una que requiere una mirada en profundidad a su consistencia, o falta de ella, en variados contextos políticos.
Por primera vez en cualquier idioma, los investigadores del Instituto Yaqeen para la Investigación Islámica han compilado setenta incidentes en los que el Profeta Muhammad se alzó por encima de la enemistad y el insulto. El objetivo principal es formar una base para entender cómo Muhammad constantemente eligió la misericordia cuando se le insultó y atacó.
El historiador francés Louis Sedillot, escribió que: “Es una gran distorsión de los hechos históricos que algunos escritores acusen al Profeta Muhammad de crueldad … Se olvidan de que no escatimó esfuerzos para eliminar el deseo heredado de venganza entre los árabes; a pesar del hecho de que la venganza era tan apreciada en Arabia como la esgrima en Europa. No leen el versículo coránico por el cual el Profeta rompió la horrible costumbre de enterrar a las niñas recién nacidas vivas. Nunca piensan en el perdón que concedió a sus peores enemigos después de la Conquista de La Meca. Tampoco consideran la misericordia que mostró a muchas tribus durante la guerra. ¿No ven acaso que él nunca abusó de su poder para cumplir un deseo de crueldad?”. [4]
Los incidentes recopilados en esta investigación demuestran precisamente esto. Tanto cuando Muhammad era un proscrito perseguido como cuando después se convirtió en gobernante, demostró consistentemente un notable nivel de tolerancia y moralidad que no tenía precedentes en la historia. Estos setenta incidentes, parafraseados en aras de la brevedad, sirven como un recordatorio de quién era realmente el profeta, y por qué más de mil millones de personas en el mundo lo tienen en tan alta estima.
La publicación completa de la investigación se puede leer en este enlace: https://www.yaqeeninstitute.org/publications/how-the-prophet-muhammad-rose-above-enmity-and-insult/
Fuente: http://www.huffingtonpost.com Traducido y editado por Nuevos Musulmanes
Referencias:
[1] Michael David. Bonner, Jihad in Islamic History: Doctrines and Practice (Princeton: Princeton University Press, 2006), 16.
[2] Ibid.
[3] Michael H. Hart, The 100: a ranking of the most influential persons in history (New York: Hart Pub. Co., 1978), 21.
[4] Louis Sédillot (d. 1875), Histoire des Arabes (Brief History of the Arabs), p. 63-64 – published 1854