Por: Equipo Editorial
El ejemplo de nuestro Profeta
A lo largo de su misión, el Profeta Muhammad, paz y bendición sobre él, se encontró con todo tipo de dificultades. Enemigos y politeístas, dentro de su propio pueblo, le insultaban de la manera más terrible, llamándole mago o incluso loco. Algunos quisieron matarle, conspirando contra él para conseguirlo. A pesar de todo esto, el Profeta, paz y bendición sobre él, intentó enseñar a gente de todo horizonte y cultura acerca del Corán, y por lo tanto acerca de la buena moralidad y el buen comportamiento.
Tal y como revela Allah en los Ayats del Corán, hay quien no tenía la menor idea de las normas básicas de comportamiento y por lo tanto no llegaban a entender cómo alguien podía superarles poseyendo tan nobles cualidades de carácter. El Profeta, paz y bendición sobre él, demostraba una paciencia tremenda en estas circunstancias, volviéndose a Allah y pidiendo Su ayuda en toda situación, y animando a la gente a ser paciente y someterse.
En muchos Ayats del Corán, Allah aconseja a nuestro Profeta tener paciencia frente a las palabras de los no creyentes:
« Así pues, ten paciencia con lo que dicen y glorifica a tu Señor con Su alabanza antes de que salga el sol y antes del ocaso. » (Qaaf ;39)
« Y que no te entristezcan sus palabras, porque en verdad el poder pertenece del todo a Allah. Él es Quien oye y Quien sabe. » (Yunus ;65)
« Supimos que tu pecho se encogía por lo que ellos dicen. » (Al-Hijr ;97)
« Pudiera ser que renunciaras a parte de lo que se te ha inspirado y que tu pecho se angustiara porque dicen: ¿Cómo es que no se ha hecho descender con él algún tesoro o ha venido con él un ángel? Tú no eres sino un advertidor y Allah es Guardián de todas las cosas. » (Hud ;12)
El buen trato con los demás
Los creyentes deben recordar las cosas frente a las cuales el Profeta, paz y bendición sobre él, era paciente, y tomarle como un ejemplo cuando se enfrentan a sus propias dificultades. Los que se desesperan al tener un problema, los que no son capaces de aceptar la más mínima objeción, quien deja de llamar al Din del Islam, o quien pierde la esperanza cuando le van mal los negocios, ha de recordar que este tipo de actitud no es compatible con el Noble Libro de Allah y con la guía del Profeta Muhammad. El creyente debe ser paciente en cualquier circunstancia, volverse a Allah para pedirle ayuda y agradecerle. Como musulmanes debemos interiorizar las nobles cualidades del Profeta, tener esperanza en la Misericordia, la Compasión y anhelar el Paraíso de nuestro Señor.
Había alrededor del Profeta gente con distintos caracteres e ideas. No obstante, el profeta mostró a lo largo de su vida un gran interés para cada uno de ellos, les advertía de sus fallos, e intentaba educarles en todos los ámbitos; tanto en cosas de limpieza como en cuestiones de creencia. Esta actitud llena de compasión, de tolerancia y de paciencia que caracterizaba al Profeta, paz y bendición sobre él, fue una guía a través de la cual muchos corazones fueron atraídos al Islam, y desarrollaron un amor verdadero por el Profeta. En el Corán Allah describe esta agradable actitud que tenía el Profeta con los que se encontraban a su alrededor:
« Por una misericordia de Allah, fuiste suave con ellos; si hubieras sido áspero, de corazón duro, se habrían alejado de tu alrededor. Así pues, perdónalos, pide perdón por ellos y consúltales en las decisiones, y cuando hayas decidido confíate a Allah.Es verdad que Allah ama a los que ponen su confianza en Él. » (Al-Imran ;159)
En otro Ayat, Allah dice al Profeta como tiene que actuar con la gente que lo rodeaba:
« Nosotros sabemos mejor lo que dicen. Tú no tienes poder de coacción sobre ellos, así pues llama con el Corán al recuerdo, a quien tema Mi amenaza. » (Qaaf ;45)
El Profeta, paz y bendición sobre él, nunca apresuraba a la gente para que entrara en el Din del Islam, y tampoco les ponía condiciones. Todo lo contrario, siempre buscaba la manera más agradable para llamarlos al Islam.
El Profeta, siempre apoyó a la comunidad de los creyentes con su gran discernimiento, y era un benefactor para ellos en cada momento. Es por ello que en mucho Ayats se refieren a él como « vuestro compañero » (Saba’ ;46 / an-Najm ;2 / At-Takwir ;22)
Aquellos creyentes que eran capaces de reconocer el grado de perfección del Profeta, se sentían más cerca de él que cualquier otro, y se sentían humildes frente a él. En un Ayat Allah dice:
« El Profeta, para los creyentes, está antes que ellos mismos; y sus esposas son madres para ellos… » (Al-Ahzaab;6)
En su libro Revivificación de las ciencias del Din, el gran sabio Imam Ghazzali, basándose en un extenso estudio de los hadiths, resume el comportamiento del Profeta con los demás de la siguiente manera:
« Cada uno creía que el Profeta le honraba más que a los otros. Cualquier que iba a él podía ver su cara… Solía llamar a su compañeros, por sus apellidos con honor, y solía dar un apellido a quién no tenía… sentía mucho afecto y cariño cuando trataba con la gente. Nadie podía gritar en su presencia».
El amor, la amabilidad y la compasión del Profeta, paz y bendición sobre él, hacían que aquellos que se encontraban a su alrededor entraran en el Islam y llenaban su corazón de creencia en Allah.