Autor: Hanan Dover – traducido por NM
Uno de los problemas entre los padres que siguen una religión es el hecho de que utilicen los miedos instintivos del niño para controlar las respuestas del niño y su carácter para que así sigan las reglas que se le imponen. Alguno padres creen que para que el niño les obedezca tienen que inculcar en el niño el ‘miedo a Allah’ de una forma intensa para que así les obedezca. El resultado de esto es que los padres inculcan en el niño una de las características de Allah de una forma punitiva durante una de las etapas más críticas de su desarrollo. Las características de misericordia de Allah son reemplazadas por los padres por las del miedo. Esto es en detrimento del desarrollo espiritual y emocional del niño y puede resultar en nefastas consecuencias a largo plazo. Este fuerte miedo se puede manifestad de otras maneras a mediad que el niño crece.
Por ejemplo, comentarios como: “Si no me escuchas Allah te va a mandar al fuego”, “Si no terminas tus deberes Allah te va a castigar”. Lo que sucede es que el niño desarrolla una visión de Allah punitiva y no una basada en el amor. El amor por Allah es la forma correcta en la que se nos instruye que le entendamos. Aun así, los padres pueden reforzar en el niño una imagen negativa de Allah si no tiene cuidado. De esta forma, a medida que el niño crece y se convierte en adulto, la mera mención de Allah puede incitar meramente una noción de punitiva de Allah quién castiga las malas acciones. Este es el resultado de la impronta en la edad temprana en el cerebro del niño del concepto de Dios. Se refuerza en la memoria. Y si este tipo de amenazas son repetidas al niño se convierte en algo permanente y con una difícil posibilidad de cambiar. Esto no quiere decir que esta visión no pueda cambiar cuando el niño se convierta en adulto, sino que será difícil de hacerlo a menos que haya un intento activo por parte de la persona de cambiarlo a través de los medios adecuados para adquirir conocimiento de Allah.
Los niños necesitan de la guía de sus padres para desarrollarse de forma sana. Los niños pequeños no tienen la capacidad de discernir entre lo que está bien y lo que está mal. De esta manera es el trabajo de los padres el guiar y cultivar sus emociones de una forma beneficiosa y que sea de ayuda.
Una de las formas que los padres pueden ayudar a cultivar un buen carácter, y aun así mantener una imagen positiva y real de Allah, es asociar a Allah con las cosas y acciones buenas. Por ejemplo: “Allah ama a aquellos que son buenos con sus padres” o “Allah estará contento contigo si haces tus trabajos y así puedas aprender porque Allah ama que Su creación adquiera conocimiento a través de la educación”. Estas son formas sencillas pero muy útiles para honrar el nombre de Allah y Sus características Divinas sin usar malamente Su nombre para ganancia propia. Al honrar el nombre de Allah y Sus características Divinas, estás haciéndoles cercanos el amor de Allah y alentándoles de una buena manera que tiene sentido para el niño. De esta forma el cerebro del niño puede desarrollarse con amor, buenos pensamientos, y el cultivo de un buen carácter.
Cuando ciertas conexione neuronales se usan de forma continuada durante la edad temprana, puede ser difícil de cambiar. Por ejemplo, a medida que los padres repiten palabras y frases a los bebes, estos aprenden a entender el habla y fortalecen las conexiones del lenguaje en el cerebro. Así que por favor, usemos el nombre de Allah de una buena forma para así criar niños amorosos, justos, y emocionalmente saludables.