Por: Habib Muhammad Al-Saqqaf
Entre los beneficios de Ramadán y el ayuno encontramos una relación especial con Allah, el Altísimo, y con Su Profeta, que Allah le bendiga y le dé paz, el cual abre a la persona laspuertas de éxtasis y saboreo del amor de Allah y Su Mensajero, que Allah le bendiga y le de paz.
Puesto que el ayuno como nos ha llegado en el Hadith Qudsi: “… excepto el ayuno, en verdad es para Mí“. Por lo tanto, es un acto entre el Creador y Su esclavo, no es visto por nadie más, no aparece en ninguna cuenta y no puede ser cuantificado.
Es un regalo continuo que no está limitado y no se puede contar; es una relación de éxtasis y experiencia con El Creador.
La razón de esta creación
La comprensión es que el Profeta, Allah le bendiga y le dé paz, es la razón de esta recompensa. Que sin él no hubiéramos conocido el Ramadán. No habríamos conocido el Corán. El Corán no habría sido revelado. Y que no hubiéramos sabido ayunar y que no hubiéramos sabido nada sobre la adoración.
Puesto que él, que Allah le bendiga y le dé paz, es el medio de todo lo bueno que nos ha llegado. Que la mejor oración y la paz sean con él. Por lo tanto, si no fuera por él, Allah le bendiga y le dé paz, nada de esto nos hubiera alcanzado.
Así que cada ayuno, y cada oración de la noche, cada Tarawih, cada Tahayyud y nuestra finalización de la recitación del Corán deben acordarnos de él, Allah le bendiga y le dé paz.
Y también deben recordar, en primer lugar que él, Allah, que lo bendiga y le dé paz, es la razón por la que este bien nos alcanza. En segundo lugar, que él, Allah le bendiga y le dé paz, es el medio por el cual nuestras acciones son aceptadas. Porque no alcanzamos a Allah a través de estas acciones, excepto que hemos actuado de acuerdo con la manera en la que él lo hizo, Allah le bendiga y le dé paz.
La guía en todas las cosas
Verdaderamente, él es el Imam en realidad, Allah le bendiga y le dé paz. Si hacemos la oración en una congregación en una mezquita detrás de un Imam, entonces en mi corazón debo sentir que este Imam es un sustituto en lugar del Profeta, que Allah le bendiga y le dé paz. El Imam original es el Profeta, que Allah le bendiga y le dé paz, porque ciertamente el Mensajero de Allah, Allah le bendiga y le dé paz, es sin duda el Imam sobre la realidad en cada presencia.
Él es el Imam en presencia de la oración, Allah le bendiga y le dé paz. Él es el Imam en el día de la intercesión mayor, Allah le bendiga y le dé paz. Él es el Imam de la noche de la ascensión, Allah le bendiga y le dé paz. Él es el Imam de la creación en el paraíso, Allah le bendiga y le dé paz.
Si se dirigen a la llanura en la que contemplarán el rostro divino, el velo no se levantará sobre los amantes a menos que se adhieran al profeta Muhammad, Allah le bendiga y le dé paz.
Es en ese momento que Allah quitará los velos de su vista y comprensión, para que puedan presenciar el rostro divino y, a través de esa experiencia, la felicidad eterna.
¿Cómo entonces no podemos amar al amado? Entonces, ¿cómo no podemos hacerle, que Allah le bendiga y le dé paz, nuestro medio y camino para acercarnos a Allah Altísimo?
Esforzarse en la imitación de él
Por lo tanto hago mi ayuno como él ayunaba, Allah le bendiga y le dé paz. Y en mi noche en pie, estoy pie como él estaba, Allah le bendiga y le dé paz. En mi recitación, recito como él recitaba, Allah le bendiga y le dé paz. Mi corazón, mi intelecto y mi presencia nunca están separados de imitarle, Allah le bendiga y le dé paz. Me lo imagino, Allah le bendiga y le dé paz, en mis estados de movimiento y quietud. Puesto que él, Allah le bendiga y le dé paz, es el camino a la felicidad.
Por lo tanto, mi querido hermano y hermana musulmana, si deseas aumentar la bondad, ten presente al Profeta, que Allah le bendiga y le dé paz, e imítale. Imagina que él, Allah le bendiga y le dé paz, está frente a ti en todos tus estados. Así se realizará la felicidad.
Gracias a su estatus, y por el amor de Allah por él, Allah le bendiga y le dé paz, acepta a los esclavos y levanta las tribulaciones y registra la felicidad por la que ha hecho feliz a la gente de felicidad.
Quienquiera que se abandone y se aleje de este amado, Allah le bendiga y le dé paz, se morderán la mano en el día de la resurrección. Y quienquiera que lo siga, Allah le bendiga y le dé paz, alcanzará la mayor felicidad en la vida de este mundo y en el día de la resurrección.
Oh Allah, haznos felices con tu Mensajero Muhammad, Allah le bendiga y le dé paz. Y reúnenos con él, que Allah le bendiga y le conceda paz, y nos concédenos su compañía en la morada de la gracia. Muéstranos su rostro en nuestro sueño y cuando estemos despierto y en el más allá, a través de tu misericordia, oh Misericordioso de los Misericordiosos.
Fuente: https://www.seekersguidance.org Traducido y editado por NewMuslim.net