Los beneficios de la oración
Autor: Isa Rojas
“Si un río pasara frente a la puerta de tu casa, y se lavaran en él todos los días, cinco veces; ¿Acaso les quedaría alguna suciedad?” Respondieron (los Sahabah): ¡No! Entonces el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Pues así es cómo Allah purifica de las faltas con las cinco oraciones”
1. La oración es luz; y así como la luz sirve para guiarse, la oración guía hacia la rectitud, previene de cometer faltas y aleja de las malas obras y las obscenidades.
2. La oración es una comunicación con el Señor del Universo. La oración es el pilar del Islam. En la oración la persona encuentra el deleite del diálogo con su Señor. Su alma se purifica, su vista se refresca, su corazón se pacifica, su pecho se libera, sus necesidades son satisfechas y descansa de las preocupaciones de esta vida y del más allá.
3. La oración tiene un aspecto exterior, como es el estar de pie, sentarse, inclinarse, postrarse y demás acciones y palabras que se pronuncian en ella. Pero también tiene un aspecto interno que se relaciona con el corazón espiritual a través de la glorificación, la magnificación, la obediencia, la alabanza, la entrega, el temor y el amor a Allah. El aspecto exterior de la oración se logra siguiendo el ejemplo del Profeta (la paz y las bendiciones de Allah sean con él) sobre cómo realizar la oración. Es aspecto interno, en cambio, se logra a través del Tawhid, la fe, la sinceridad y la entrega.
4. La oración tiene un cuerpo y un espíritu. Su cuerpo lo forman las acciones de levantarse, sentarse, inclinarse, postrarse y recitar el Corán. Su espíritu lo constituye la glorificación y las alabanzas a Allah, el sentimiento de temor devocional, las súplicas, el arrepentimiento y pedir paz y bendiciones para el Profeta (la paz y las bendiciones de Alá sean con él), su familia y todos los siervos rectos.
5. Allah ordenó que todo ser humano luego de pronunciar los dos testimonios de fe aferre su vida a cuatro preceptos: la oración (As-Salah), el ayuno (As-Siam), la solidaridad social obligatoria (Az-Zakah) y la peregrinación (Al-Hayy). Todos estos preceptos constituyen los pilares sobre los que se alza el Islam. Además son un entrenamiento para ejecutar las órdenes de Allah sobre el individuo, sus bienes, sus pasiones y sus deseos. El ser humano debe someter su vida a las órdenes de Allah y Su Mensajero, y no a sus propios deseos y pasiones.
6. Mediante la oración, el musulmán cumple con los mandamientos establecidos por Allah para cada uno de los miembros de su cuerpo. Así se entrena para cumplir con las órdenes de Allah en todos los aspectos de su vida: en su moral, en sus relaciones interpersonales, en su alimentación, en su vestimenta, etc. De este modo el musulmán se entrega a la obediencia de su Señor dentro y fuera de la oración.
7. La oración previene de incurrir en malas acciones y es un medio de expiar nuestras faltas. Abu Hurairah (Allah se complazca con él) relató que oyó al Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah sean con él) decir:
“Si un río pasara frente a la puerta de tu casa, y se lavaran en él todos los días cinco veces. ¿Acaso les quedaría alguna suciedad?” Respondieron (los Sahabah): ¡No! Entonces el Profeta (la paz y las bendiciones de Alá sean con él) dijo: “Pues así es cómo Alá purifica de los pecados con las cinco oraciones”.
Fuente: http://viveislam.islammessage.com/Article.aspx?i=1067