Autor: Zainab Mudallal
Cuando faltan sólo unos pocos días para que acabe el mes sagrado del Ramadán, los musulmanes que ayunan se dividen en dos grandes categorías. Algunos están tan acostumbrados a los ritmos del ayuno que les es casi normal a estas alturas. Para otros, el tramo final es, psicológica y físicamente, el más difícil.
Este año supone un reto aún mayor, porque Ramadán cae durante algunos de los días más largos y calurosos del año, lo que requiere un ayuno de 15 horas o más en algunas partes del mundo. El dramático cambio en los hábitos alimenticios regulares, puede pasar factura en la salud y la energía, y hace que sea difícil mantener un régimen de ejercicio regular. Pero hay maneras de darle la vuelta.
Estos son algunos consejos para llevar le ayuno de Ramadán de forma que sea beneficioso, en lugar de perjudicial para la salud:
Coma comidas, no banquetes.
Cuando el cuerpo no recibe suficiente alimento, se quema la grasa para producir energía, lo que puede ayudar a quemar uno kilos. Pero ese beneficio se puede perder con un exceso en la comida posterior a la puesta de sol, el iftar. Dr. Terry Meriden, endocrinólogo de la Clínica de Tiroides y Metabolismo en Peoria, Illinois, dice que es importante limitar las porciones, o una oportunidad para bajar de peso puede ser desperdiciada. Aunque pueda parecer que la reacción natural sea llenarse demasiado cuando es finalmente tiempo para comer, comer en exceso causa molestias en el abdomen y prácticamente descarta todas las esperanzas de estar activo después. Lo mismo ocurre con el agua. No hay ninguna razón beberse los ocho vasos recomendados en cuanto se pone el sol.
Levántate para la comida de antes del amanecer
Una parte integral de Ramadán es el suhur, la tradicional comida previa al amanecer, pero muchos carecen de estómago para una comida en la oscuridad antes del amanecer. Dado que este mes ofrece a los ayunantes pocas oportunidades para comer y beber, es importante utilizarlas todas para pasar mejor el día. Para esta comida, come alimentos que liberarán energía durante todo el día. A fin de mantenerte lleno, elige alimentos altos en fibra y alimentos ricos en proteínas y grasas saludables, como el aguacate. Y no hace daño ser prevenido. Hierve una docena de huevos duros, haz de batidos y mantenlos en el congelador, hornea unos panecillos de salvado, o preparar un poco de avena con frutos secos y fruta para hacer tu rutina de la mañana un poco más fácil.
Haga ejercicio antes de comer
Cuando no hemos consumido alimentos o bebidas durante todo el día, la idea del ejercicio puede sonar aterradora. Pero los expertos dicen que es importante para mantener un estilo de vida sano, aunque se recomiendan ejercicios de baja intensidad. Dr. Meriden sugiere trabajar en las horas previas al amanecer, antes de suhur. Si usted no es un madrugador, Nadia Amrikani, una entrenadora personal en el gimnasio Boston Fisique, sugiere hacer ejercicio después del iftar, después de beber agua y comer una porción de hidratos de carbono complejos y verduras. Pero toma alguna proteínas cuando hayas acabado.
Ramadán también proporciona una oportunidad para cambiar el entrenamiento hacia entrenamientos con pesas o entrenamiento de intervalos, ya que es recomendable hacer menos cardio. “Esto le dará a tu cuerpo un cambio de la rutina y es muy probable ver resultados concretos”, dice Amrikani. Yoga, Pilates y natación son opciones populares, ya que no implican sudar demasiado, lo que nos daría mucha sed. El ejercicio ligero también puede ayudar a distraer la atención de pensar constantemente acerca de la comida y la bebida.
Comer bien y mantenerse hidratado
Muchos acogen con satisfacción la oportunidad de quemar grasa, pero el ayuno durante un largo periodo de tiempo puede hacer que tu cuerpo empiece a descomponer los músculos para energía, lo que es menos deseable. Para evitar que esto ocurra, las comidas deben consistir en hidratos de carbono complejos, grasas saludables y proteínas para ayudar así a liberar energía lentamente durante todo el día. Estos alimentos también te harán sentirte más lleno, lo cual es una ventaja. Evitar la cafeína es una buena idea, ya que las bebidas con cafeína pueden deshidratarte. Además, el ayuno durante todo el día puede aumentar los antojos de azúcar, pero es importante no excederse a la puesta del sol con la pastelería para evitar el aumento de peso. “Dale a tu cuerpo lo que necesita, no lo que está pidiendo”, dice Amrikani.
Recuérdate a tí mismo por qué estás haciendo esto
A menudo se olvidada, pero el ayuno anual, uno de los cinco pilares del Islam, es también el compromiso total de la mente de la persona. Así que cuando el último tramo se hace difícil, es importante recordar por qué comenzaste a ayunar en primer lugar. Este mes es un período de crecimiento interno. Ofrece la oportunidad de practicar la moderación, limpiar el cuerpo y el alma de impurezas, y construir un sentido de comunidad. También puede ofrecer un sentido de solidaridad con los que no pueden pagar los alimentos o bienes materiales, y ayudar a inspirar actos de caridad en todo el año.
Fuente: http://qz.com/