Por: Equipo Editorial
Son pocos los que llegan al Islam por un camino exclusivamente individual. Para la mayoría de nosotros, nuestro camino al Islam ha estado lleno de encuentros. Musulmanes, amigos o desconocidos, que hemos conocido y en quienes hemos visto algo que nos hizo acordarnos de Allah y de la belleza de su Din. Quizás lo que nos ha recordado ha sido su generosidad, su paciencia, o incluso su tremenda felicidad, esa que se puede conseguir únicamente a través de la certeza en Allah.
Ciertamente, Muhammad Ali es uno de estos musulmanes inspiradores. Considerado por muchos como el atleta más grande del siglo 20, Muhammad Ali es sobre todo un hombre extraordinario; marido, padre, amigo, socio… el que llegaba a conocerle se quedaba impactado por la bondad en su mirada, y la nobleza de su carácter.
Fabuloso en el ‘ring’, se ganó también una reputación a través de sus declaraciones públicas, siendo maestro de la retórica en conferencias de prensa y entrevistas. Hoy compartimos con vosotros un vídeo en el cual un niño pregunta a Muhammad Ali acerca de lo que tiene pensado hacer después de boxear. Su repuesta, pedagógica y profunda, es un buen recuerdo para nosotros de la meta en nuestra vida.