Por: Abu Amina Elias
Dar en caridad es uno de los cinco pilares del Islam y una de sus enseñanzas más importantes. Los musulmanes están obligados a dar en caridad un pequeño porcentaje de su riqueza acumulada cada año, llamado Zakat, pero la caridad no siempre toma forma monetaria. De hecho, cualquier buena acción hecha por otra persona es un acto de caridad.
Ibn Abi Shayba transmitió que el Mensajero de Allah, la paz y las bendiciones sean con él, dijo:
Toda buena acción es caridad. (Sahih Muslim 1005)
En otra narración, el Profeta dijo:
Toda buena acción es caridad. Verdaderamente, es una buena acción recibir a tu hermano con una cara sonriente, y verter lo que queda de tu vaija en el vasija de tu hermano. (Sunan At-Tirmidhi 1970)
La caridad, en este sentido más amplio, no es simplemente dar dinero, sino que es una forma de vida. Los musulmanes tienen la responsabilidad moral de dar caridad todos los días de su riqueza, tiempo y esfuerzo como actos de gratitud por las bendiciones que Allah les ha dado. Allah nos ha dado salud, riqueza, tiempo y energía, por lo que tenemos dar a los demás en Su servicio.
Abu Huraira transmitió que el Mensajero de Allah, la paz y las bendiciones sean con él, dijo:
Se debe dar caridad por cada articulación de la gente cada día en que el sol se levanta. Ser justo entre dos personas es caridad. Ayudar a un hombre con su animal y levantar su equipaje es la caridad. Una palabra amable es caridad. Cada paso que das hacia la mezquita es caridad y quitar cosas dañinas del camino es caridad. (Sahih Bukhari 2827)
Los Compañeros se quejaron una vez al Profeta de que los ricos tenían más posibilidades de obtener recompensas debido a su capacidad para gastar en caridad. Sin embargo, el Profeta les dijo que incluso el más pobre de los musulmanes es capaz de ganar grandes recompensas a través de las buenas acciones como alabar a Allah e incluso satisfacer sus deseos sanos de una manera legal.
Abu Dharr transmitió que algunas personas de entre los Compañeros fueron al Mensajero de Allah y dijeron: “Oh Mensajero de Allah, los ricos obtienen todas las recompensas. Hacen la oración como nosotros hacemos la oración, ayunan cuando ayunamos, y dan caridad de su riqueza extra”. El Mensajero de Allah, la paz y las bendiciones sean con él, dijo:
¿Acaso Dios no ha puesto para vosotros maneras de dar caridad? Cada glorificación de Allah es caridad, cada declaración de Su grandeza es caridad, cada alabanza de Él es caridad, cada declaración de Su unidad es caridad, aconsejar el bien es caridad y prohibir el mal es caridad y las relaciones íntimas del hombre con su esposa son caridad.
Los Compañeros dijeron: “Oh Mensajero de Allah, ¿hay recompensa por el que satisface sus deseos?”. El Profeta dijo:
Si uno de vosotros lo hiciese de manera ilícita sería una falta. De la misma manera, si se hace de forma lícita, tendrá una recompensa. (Sahih Muslim 1006)
Hacer buenas acciones para nuestra familia es una forma importante de dar caridad y fortalecer los lazos familiares. Debemos dar primero a aquellos que dependen de nosotros para cuidar de ellos.
Abu Huraira transmitió que el Mensajero de Allah, la paz y las bendiciones sean con él, dijo:
La mejor caridad es la que se da cuando eres independiente, y debe comenzar gastando en tus dependientes. (Sahih Bukhari 5041)
Abu Mas’ud transmitió que el Mensajero de Allah, la paz y las bendiciones sean con él, dijo:
Cuando un musulmán gasta en su familia con buena intención, se considera como caridad para él. (Sahih Bukhari 5036)
La caridad debe ser un modo de vida practicado por toda la familia. Si toda la familia coopera en la realización de actos de caridad, sus recompensas se reforzarán y aumentarán mutuamente.
Aisha transmitió que el Mensajero de Allah, la paz y las bendiciones sean con él, dijo:
Cuando una mujer gasta en caridad de la comida de su casa sin desperdiciarla, tendrá una recompensa por lo que gastó. Su esposo tendrá una recompensa por lo que ganó y el tendero tendrá una recompensa similar. Sus recompensas no se disminuirán unar a otras en nada. (Sahih Bukhari 1359)
Incluso las pequeñas buenas acciones pueden tener un efecto positivo tremendo en los demás en esta vida. Por esta razón, el Profeta nos dijo que nunca menospreciaramos ninguna buena acción, ni siquiera sonreír a otros, decir una palabra amable, o dar la mitad de un dátil. Pequeñas acciones como éstas pueden ser la razón por la que Allah nos admita en el Paraíso.
Abu Dharr transmitió que el Mensajero de Allah, la paz y las bendiciones sean con él, dijo:
No consideres que ninguna buena acción sea insignificante, incluso recibir a tu hermano con una cara alegre. (Sahih Muslim 2626)
Adi ibn Hatim transmitió que el Mensajero de Allah, la paz y las bendiciones sean con él, dijo:
Protegeros del Fuego incluso con la mitad de un dátil caridad, y si ni siquiera tienes eso, entonces con una palabra amable. (Sahih Bukhari 6195)
La caridad debe realizarse no sólo para los seres humanos, sino también para los animales. En una narración, el Profeta nos habló de una prostituta que ayudó a un perro sediento a tomar un poco de agua. Allah apreció su acto sincero tanto que sus faltas fueron perdonados.
Abu Huraira transmitió que el Mensajero de Allah, la paz y las bendiciones sean con él, dijo:
Una prostituta vio a un perro sediento alrededor de un pozo en un día caluroso y con la lengua colgando de la sed. Sacó un poco de agua para este con su zapato, por lo que Allah le perdonó. (Sahih Muslim 2245)
Al gastar nuestra riqueza, tiempo y energía en ayudar a los demás, Allah nos promete multiplicar y magnificar nuestras buenas acciones en tremendas recompensas en la próxima vida. Allah dice:
Los que gastan sus bienes en el camino de Allah se parecen a un grano que produce siete espigas y cada una de las espigas lleva cien granos. Así multiplica Allah a quien Él quiere; Allah es Espléndido y Conocedor. (Surah de La Vaca, 2:261)
Abu Huraira transmitió que el Mensajero de Allah, la paz y las bendiciones sean con él, dijo:
Allah dice: Gasta en caridad, oh hijo de Adam, y yo gastaré en ti. (Sahih Bukhari 5037)
De esta manera, la caridad no disminuye la riqueza, es decir, la verdadera riqueza de tener buenas obras para la próxima vida. Perdonar a otros y comportarse con humildad son también buenas acciones que elevan el honor y el rango de los que las hacen.
Abu Huraira transmitió que el Mensajero de Allah, la paz y las bendiciones sean con él, dijo:
La caridad no disminuye la riqueza, nadie perdona a otro excepto que Allah aumenta su honor, y nadie se humilla por el bien de Allah excepto que Alá eleva su rango. (Sahih Muslim 2588)
Por lo tanto, debemos inculcar la caridad como una actitud y forma de vida dentro de nosotros mismos, nuestras familias y nuestras comunidades. Deberíamos realizar buenas obras de forma habitual para nuestros semejantes e incluso para los animales. La riqueza, el tiempo y el esfuerzo que ponemos en el trabajo caritativo volverá a nosotros como recompensas multiplicadas en esta vida y en la próxima. Así vemos, que toda buena acción es caridad, independientemente de cómo de insignificante nos pueda parecer, y no debemos menospreciarla.
Fuente: https://abuaminaelias.com Traducido y editado por Nuevos Musulmanes