Por: Qasim Rashid
Aquel que diga que el Corán defiende el terrorismo obviamente no ha comprendido la lección que da en cuanto a la violencia.
El permiso dado en el Corán (22:40-41) para luchar en defensa personal no solo fue concedido para defender a los musulmanes de ser perseguidos, sino para defender a los cristianos, judíos y personas de todas las creencias de actos de terror como los cometidos por el Isis hoy.
Solo hay dos grupos en nuestra sociedad que defienden el mito de que el Corán enseña el terrorismo: los anti musulmanes y los extremistas del Isis. Ambos están equivocados. Esta conclusión tan simplista olvida que hay muchos países que están experimentando el terror ahora mismo. Obvia, también, el comercio internacional de armas de poderosas naciones occidentales que no respetan los derechos humanos y ha causado la muerte de más de 60.000 niños en Yemen. Además, olvida el hecho de que mientras que los somalís sufren de hambre extrema, los medios de comunicación los ignoran, al igual que han ignorado la crisis siria de los últimos años.
Aun así, con los ataques en Egipto, Londres y Siria, los críticos por defecto culpan al Corán citando sus presuntos versos violentos. No podemos resolver las atrocidades sirias, yemenís y somalís, hasta que no nos sometamos a la justicia. Echar la culpa al Corán no solo puede demostrarse que es falso, sino que malgasta preciados recursos que podrían ser utilizados para parar la guerra y el hambre.
Hay tres hechos que demuestran que nada en el Corán permite el terrorismo, y mientras que los islamófobos y el Isis van a seguir ignorando estos tres hechos, el Profeta Muhammad y los musulmanes de todo el mundo van a seguir defendiéndolos.
Hecho número 1
El Corán hay que leerlo en su totalidad, eso de citar versículos fuera de contexto no vale. El Corán dice:
Creemos, en él, todo procede de nuestro Señor. (La familia de Imran, 3:8).
El Isis y los islamófobos lo que hacen es seleccionar y manipular el contenido. En este versículo del Corán (3:8) se llama a las personas que seleccionan trozos del Corán como “perversas”, declarando:
Los que tienen una desviación en el corazón siguen lo ambiguo, con ánimo de discordia y con pretensión de interpretarlo. (La familia de Imra, 3:8)
Pero, ¿no hay versos del Corán que de hecho dicen “matadlos donde los encontréis”?
Sí, y así llegamos al hecho número dos.
Hecho número 2
El Islam es una religión en la que en ciertas y estrictas situaciones se permite la defensa personal. ¿Cuándo? Deja que el Corán te lo explique.
En primer lugar, el Profeta Muhammad y sus compañeros soportaron intensas persecuciones en Mecca durante casi 13 años, en este periodo se incluye un boicot en el que durante 3 años fueron privados de comida, y en el que murió su esposa Jadiya. Y los musulmanes no tomaron represalias.
Luego, Muhammad envió a algunos de sus compañeros para solicitar refugio en Abisinia bajo la protección de un rey cristiano, y los musulmanes siguieron sin defenderse. En tercer lugar, cuando incluso los compañeros del Profeta le pidieron contraatacar, el Profeta Muhammad respondió: “No se me ha dado el permiso para luchar”. Y por último, cuando las persecuciones se hicieron insoportables, Muhammad y los musulmanes abandonaron Meca, ya que seguían negándose a luchar.
Estos refugiados atravesaron 240 millas a través del desierto escapándose del terrorismo, llegando al final a la ciudad de Medina, en la cual predominaban los judíos. Si islam instruyera el terrorismo, este hubiese sido el momento de demostrarlo, en cambio, el Profeta Muhammad creó la Constitución de Medina con los judíos, estableciendo un estado unificado.
Aun así los extremistas que querían matadlos en Meca, los persiguieron para matadlos en Medina. Y fue en este momento que en el Corán se habló de lucha por primera vez, permitiendo a los musulmanes luchar en defensa propia. El permiso dado en el Corán (22:40-41) para luchar fue solo dado a “A quienes luchen por haber sido víctimas de alguna injusticia” (22:40). Y lucharon no solo para defender a los musulmanes, sino también a cristianos y judíos. Todos los versos posteriores en los que se habla de luchar, están condicionados por esta regla de la defensa personal, si no sería seleccionar según conveniencia, algo que el Corán prohíbe por ser perverso.
Además, el Corán (2:193-194) declara que los musulmanes solo han de luchar en combates activos, es decir, incluso si durante la batalla el enemigo pide paz, has de concedérsela. En Islam no hay lo que se llama “daño colateral”, mutilación o tortura.
Con todo y con esto, el hecho número 3 destruye la ideología del Isis.
Hecho número 3
Podrás ahora entender a quien se refiere el Corán cuando dice “matadlos a ellos dónde los encontréis”. El “ellos” son esos terroristas que persiguieron a la gente por su religion, los echaron de sus casas y los volvieron a perseguir para matadlos en sus nuevas casas.
En otras palabras, ese “ellos” es lo similar a lo que hoy en día conocemos como Isis. El Corán permite matar terroristas en defense propia, porque han declarado la guerra a musulmanes, cristianos, judíos y gente de todas las religiones. Aun así, si los terroristas se rinden el Corán prohibe cualquier agresión hacía ellos. Esta enseñanza no es solo una teoría, sino que es historia islámica.
El Profeta Muhammad hizo algo digno de admirar cuando regresó a Meca después de 40 años. Después de haber sufrido persecuciones e inluso el asesinato de sus propios hijos, perdonó a todos los de Meca con una única condición, que aceptaran el libre pensamiento. No forzó al Islam. No declaró la guerra. No tomó prisioneros. Perdonó.
Stanley Lane-Poole, historiador no musulmán, dice: “El día del mayor triunfo de Muhammad sobre sus enemigos fue también el día de su gran victoria sobre sí mismo. Perdonó libremente a los Quraish todos los años de dolor y cruel desprecio que les habían afligido y dio una amnistía a toda la población de La Meca”.
Ese es el amor y la compasión que el Islam y el Corán enseñan. Cualquier persona honesta puede ver que Isis representa al Profeta Muhammad de la manera en que la oscuridad representa la luz; Los dos son completamente opuestos.
Las ideas erróneas sobre el Islam se arrastran porque la gente aprende sobre la creencia de las noticias de los titulares en lugar del Corán y el Profeta. Lea el Corán, lea una biografía de Muhammad, busque la de educación del verdadero Islam.
Fuente: http://www.independent.co.uk Traducido y editado por Nuevos Musulmanes